Control Total del Entorno Carcelario

Los establecimientos penitenciarios representan uno de los entornos de seguridad más exigentes y críticos, donde la protección debe ser absoluta y multidireccional: proteger a la sociedad de los internos, proteger a los internos entre sí, proteger al personal penitenciario, y proteger a visitantes y proveedores. Este ecosistema cerrado requiere sistemas de seguridad que operen con precisión milimétrica las 24 horas del día.
El control de acceso va más allá de la simple identificación, implementando múltiples filtros de seguridad donde cada persona debe pasar por arcos detectores de metales de alta sensibilidad que identifican elementos tan pequeños como clips o alambres. Las máquinas de inspección RX son fundamentales para realizar controles sorpresivos en celdas y áreas comunes, detectando túneles, objetos ocultos en paredes y armas improvisadas sin necesidad de desarmar completamente los espacios. Los detectores manuales permiten inspecciones específicas manteniendo la operatividad del establecimiento, mientras que los equipos analizadores de trazas detectan residuos de drogas o explosivos en ropa y pertenencias, integrándose con sistemas de monitoreo que incluyen cámaras con visión nocturna y sensores de movimiento.